martes, 20 de enero de 2009

Mina bajo mis pies




Encerrada en el centro
de un millón de espacios abiertos
con salidas y caminos
sin poderme mover
porque al correr
la mina bajo mis pies explotaría
sin dejarme respirar
Se abriría el cuerpo que porta mi alma
dejándola en libertad.

Por ahora me quedare pensando
en lo que pasara
sin poderlo evitar.
Me sentare en la mina
a esperar
y que me mueva un huracán.

4 comentarios:

Anónimo dijo...

estados de la mente
un claustrum inducido...

no hay minas externas que nos detengan
porque somos nuestro mayor miedo
nosotros mismos
nuestros peores enemigos
y nuestros propios obstáculos.

A veces sólo se necesita un empujón para evitar la pasividad.

Todo es evitable, excepto envejecer, morir.. hasta podría decir amar..

no hay nada de malo con denudarse el alma
no se hacen huecos por eso.

SANTIAGO LIBERAL dijo...

QUEDARSE AL LADO DE UNA MINA ES PELIGROSO, ES MEJOR RESPIRAR JUNTO AL MAR.
UN ABRAZO Y UN PLACER LEERTE

Gerardo Carvajal dijo...

me gustó esto. dice algo que siempre he pensado. la vida es un gran campo minado, te puede volar a la mismísima gloria o a la mismísima mierda en un segundo. ¿entonces?... caminar, sentarse, acostarse... siempre habrá una mina debajo de nosotros.

SANTIAGO LIBERAL dijo...

he incluido tu blog en mi librería de los blogs.
entra, y si hay algo que quieras quitar o agregar, me lo dices